Este proyecto se emplaza en un sitio urbano de 2.000m2 (100×20) ubicado en la costa de Curanipe, región del Maule. Era un sitio deteriorado producto de una tala de monocultivo de pinos, donde se busca regenerar con diferentes especies nativas y exóticas.
Un tramo longitudinal de cerro con una pendiente exponencialmente pronunciada fue la base de este encargo. De tal manera se decidió trabajar el perfil de la ladera generando diferentes bancales, empotrando la vivienda en uno de ellos, generando una protección hacia la contención oriente y apertura visual al mar por la fachada poniente.
Un desafío era captar la mayor cantidad de luz natural posible para un terreno que mira principalmente al poniente, de tal manera se trabaja con lucarnas y ventanas altas que permiten el ingreso de luz en diferentes puntos de la vivienda (sobre todo en los recintos de orientación sur) y a distintas horas del día.
Debido a la falta de recursos para levantar la vivienda en una etapa, fue que se proyectó en 4 fases distintas, comenzando con un módulo tiny de 5x5mts. que tenía todo lo necesario para ir creciendo en el tiempo. De tal manera luego se incorporó talleres en una segunda etapa, living y estar en una tercera etapa, y la cocina y estudio en una cuarta etapa. En este progresivo crecimiento puertas correderas que antes eran exteriores se transformaron en biombos interiores.